Cada año, el 12 de octubre, más de dos millones de romeros portan la imagen de la Virgen de Zapopan en un recorrido de 5 kilómetros.
Guadalajara es una de las ciudades más animadas de México, conocida por su cultura, baile, música y comida. También es conocido por su impresionante arquitectura como se ve en sus hermosas iglesias y la catedral.
Los católicos conforman el 95% de la población aquí, y Guadalajara es considerada una de las capitales católicas de México, con más de 400 parroquias.
la catedral de guadalajara
Ubicada en el centro histórico de la ciudad, sobre la avenida Fray Antonio Alcalde, la Catedral Metropolitana, denominada Catedral Basílica de la Asunción de Nuestra Señora, es considerada un ícono arquitectónico de esta ciudad mexicana. Construido hace 400 años, sigue siendo el símbolo más representativo del catolicismo en Guadalajara. La construcción de esta iglesia se inició en 1561, por encargo del rey Felipe II de España y realizada por el arquitecto Martín Castillas. Tardó 57 años en completarse, aunque no fue consagrada como catedral hasta el 12 de octubre de 1716.
Su estilo arquitectónico es único, y lo que lo hace tan hermoso es que su diseño es bastante ecléctico. Esta es la única catedral del país que tiene un interior gótico y combina las influencias góticas con detalles moriscos, neoclásicos y barrocos. Desde kilómetros de distancia, es fácil distinguir la catedral por sus dos torres de 65 metros de altura que están rematadas con cruces. Estas torres, con forma de cala al revés, son consideradas un símbolo distintivo de Guadalajara y, por lo tanto, se han convertido en una foto obligada para todo viajero. Sin embargo, es interesante saber que estas torres no son las originales; Tuvieron que ser reconstruidos dos veces después de que fueran dañados por terremotos, primero en 1.818 y luego en 1.849. Dato curioso: la catedral tiene 19 campanas, y para llegar a las campanas en la parte superior de las torres hay 98 escalones.
El interior de la iglesia es rico en detalles, desde pequeñas pinturas intrincadas hasta esculturas impresionantes y asientos de madera tallados de manera elaborada. Las paredes de la iglesia están salpicadas por la luz colorida de las hermosas vidrieras francesas que se componen de motivos católicos. El altar mayor está hecho de mármol y plata, y tiene una talla elaborada. Sin embargo, esta no es la única obra de arte en la iglesia; hay nueve altares más adornados con frescos creados por artistas mexicanos. En la entrada, hay un enorme órgano francés lleno de historia. Este es el segundo órgano más grande de todo México, y todavía se usa hasta el día de hoy. Este fantástico instrumento musical aporta un toque único a las ceremonias que aquí se celebran.
Debajo del altar mayor y el coro se encuentra uno de los lugares más visitados dentro de la catedral: las criptas. Aquí reposan los restos de todos los obispos y cardenales que han formado parte de la diócesis desde el siglo XVI. Además, la iglesia alberga dos tesoros. El primero es el Relicario de los Mártires, que exhibe los restos de 23 hombres que murieron durante la Guerra Cristera. Estos hombres fueron beatificados por el Papa Juan Pablo II en 1992. El segundo tesoro es una escultura de la Virgen de la Rosa, regalo del emperador Carlos V.
Una romería única cubierta de música y danza
Cada año hay un evento que nadie quiere perderse. La Romería de Nuestra Señora de Zapopan es tan impresionante que en 2018 incluso fue inscrita en la Lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO. La celebración data de 1734. Cada año, el 12 de octubre, más de dos millones de romeros llevan la imagen de la Virgen de Zapopan en un recorrido de cinco kilómetros, desde la Catedral Metropolitana de Guadalajara hasta la Basílica en la vecina localidad de Zapopan. La Romería es la culminación de un ciclo conocido como La Portación de la Virgen, que comienza en mayo. Durante estos meses la imagen de la Virgen visita varias parroquias, hospitales, mercados, fábricas, escuelas y cárceles, y por último la Catedral antes de regresar a Zapopan. La imagen de la Virgen es la original, creada durante el siglo XVI, y se la considera altamente milagrosa.
El viaje de regreso es la mayor celebración religiosa de la ciudad. Comienza con la música tradicional de los mariachis, que nació en este estado mexicano y también se encuentra en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO. Luego de esta serenata, la gente la sigue con flores, papel picado y artesanías, mientras se realizan actuaciones musicales y de danza. Más de 30,000 bailarines nativos preparan presentaciones especiales para “el porteo”, y la gente abre sus puertas y ventanas para mirar y unirse a la celebración.